El proceso de hacerse mayor supone acumular muchas aptitudes, como la madurez, la gentileza, la sabiduría, la experiencia, y la capacidad de ver las cosas con perspectiva, por nombrar algunas. No obstante, hacerse mayor también puede acarrear algunos retos.
Físicamente es más difícil liberarse de esos kilos de más. De hecho, 1 de cada 3 adultos mayores de 65 años son obesos. El riesgo de padecer enfermedades crónicas como la diabetes, patologías cardiovasculares y ciertos tipos de cáncer también aumenta con la edad. Los dolores físicos también aparecen con el envejecimiento.
¡Aprovecha todos los beneficios que puede aportarte el Yoga!
Psicológicamente y emocionalmente las personas mayores también experimentan más casos de depresión, ansiedad y otros desórdenes mentales. La memoria puede deteriorarse, incluso el equilibrio puede verse alterado, y con ello, la conciencia que se tiene de uno mismo.
Todo ello sin mencionar el número de personas que padecen Alzheimer, que se duplica cada 5 años a partir de los 65 años. Una enfermedad que daña la habilidad de relacionarse socialmente con el mundo.
Con estos datos, el proceso del envejecimiento a menudo conlleva algunos miedos a medida que se acumulan los cumpleaños y se es apto para ser pensionista. Las buenas noticias son que hay bastantes cosas que se pueden hacer para mejorar la salud general y el bienestar a pesar de la edad.
Comer de manera saludable y hacer ejercicio de manera regular pueden ayudar en la prevención de enfermedades, lesiones y a mantener un físico en forma. Además, la meditación y los ejercicios mentales pueden mantener una mente despierta y activa.
Numerosos estudios demuestran los beneficios del yoga a nivel de salud física, mental y emocional. El abanico de beneficios del yoga es especialmente importante a medida que se envejece. Las personas mayores, que suelen padecer dolor, presión en las articulaciones, pérdida de equilibrio, osteoartritis y otras limitaciones físicas, pueden beneficiarse de la incorporación de la práctica de yoga es su rutina diaria.
Los beneficios del yoga para las personas mayores
La jubilación es el momento perfecto para poder probar nuevas aficiones y adoptar nuevos hábitos saludables que en la edad laboral quizá no se consideraban por falta de tiempo. No haber practicado nunca yoga no es motivo para no hacerlo ahora, pues lo beneficios del yoga para las personas mayores no son para ignorarlos:
- Fortalecimiento de los huesos. El yoga para las personas mayores puede prevenir la aparición de osteoporosis, que causa que los huesos se vuelvan débiles y quebradizos. La osteoporosis se produce cuando deja de producirse nueva masa ósea a medida que se reduce la densidad ósea. Algo muy común que ocurre con la edad.
- Se reduce el estrés. El yoga ofrece una manera muy relajante de eliminar tensiones que pueden acumularse en el cuerpo, especialmente en los hombros y la parte superior de la espalda. Es conocido por ayudar a aliviar el estrés que conduce a la hipertensión, lo cual se traduce en una reducción en la necesidad de tomar medicación diaria. El yoga también ayuda a reducir la ansiedad, disminuyendo el ritmo cardíaco, reduciendo la presión arterial, y ayudando a respirar mejor. La práctica de yoga, como ocurre con cualquier actividad física, reduce los niveles de cortisol y aumenta la sensación de bienestar.
- Mejora los hábitos del sueño. Debido a que el yoga para las personas mayores puede ser tan relajante, muchas personas han confirmado que duermen más profundamente y más tiempo. Algo que suele ser un problema para las personas mayores.
- Mejora el equilibrio, la flexibilidad, la movilidad y la fuerza. Los movimientos lentos y controlados implicados en la práctica de las posturas de yoga puede conducir a un mayor control del equilibrio y del movimiento, reduciendo también el riesgo de caídas. Dado que las caídas suelen ser la principal causa de lesiones físicas en las personas mayores, el yoga puede ofrecer las herramientas necesarias para mejorar la movilidad y poder moverse de manera más segura.
- Se reduce el riesgo de depresión. El yoga mejora el humor; pues la combinación de movimiento, respiración y meditación puede crear un estado general de bienestar. Además, como la práctica de yoga suele hacerse en una sala con más compañeros, se reciben también los beneficios de mantenerse socialmente activo.
- Alivia dolores y molestias. Aunque se padezcan algunas limitaciones físicas, el yoga puede ayudar a reducir molestias y dolores asociados al envejecimiento. El yoga puede ser especialmente beneficioso para aquellas personas que sufren osteoartritis, y enseñar a relajarse y respirar para sobrellevar el dolor crónico que se pueda sufrir.
Posturas de yoga básicas para incluir en la rutina diaria
En una práctica de yoga el profesor puede mencionar los nombres en español o en sánscrito de algunas posturas o asanas. Para hacer las primeras clases más divertidas, está bien familiarizarse con el nombre de algunas posturas básicas.
- La postura del niño (Balasana): Esta es una postura de descanso. Apoyados de rodillas sobre las espinillas, con los glúteos apoyados sobre los talones. Se extienden los brazos hacia delante, dejando la frente descansar sobre la esterilla.
- La postura de la montaña (Tadasana): Después de una secuencia de yoga (una combinación de poses), es habitual volver a esta postura de pie. Es como si simplemente estuviéramos de pie muy quietos, pero realmente se trata de una postura activa. Se activa la pelvis, se extienden los brazos hacia los lados y se fortalecen los músculos de las piernas y abdomen.
- La postura del árbol (Vrksana): Se empieza en la postura de la montaña. Aguantando el equilibrio sobre una pierna, se eleva la otra de manera que el pie descanse sobre la espinilla o el muslo de la pierna contraria (no sobre la rodilla). Si se tienen problemas para mantener el equilibrio, se puede Practicar cerca de una pared para apoyarse.
- La postura de el perro boca abajo (Adho Mukha Svanasana): Estando boca abajo, apoyado sobre rodillas y manos se elevan las caderas hacia arriba, extendiendo las piernas y los brazos. Como en una V invertida. Está bien si los talones no tocan el suelo, e incluso se pueden flexionar las rodillas para mantener la espalda más recta.
- La postura de la cobra (Bjhujangasana): Tumbados boca abajo en el suelo, con las manos apoyadas en la esterilla justo al lado del pecho. Utilizando los músculos de la espalda se eleva la parte superior del cuerpo, empujando con las manos.
- La postura del guerrero 1 (Virabhadrasana): desde la postura del perro boca abajo, se lleva una pierna hacia delante, de manera que un pie quede entre las manos. Se gira el pie de la pierna trasera a 45 grados. Utilizando la fuerza del abdomen y los músculos inferiores, se eleva el tronco, mirando hacia delante elevando los brazos, tratando de alinear la pelvis hacia delante.
Disfrutar de los beneficios del yoga para personas mayores desde casa
En muchas ocasiones no es posible acudir a un centro de yoga donde poder practicar y beneficiarse de sus ventajas. Bien por la situación de pandemia que vivimos actualmente o por las limitaciones físicas de cada persona.
En Wayalia entendemos esta situación, por ello contamos con las mejores cuidadoras de personas mayores a domicilio. Nuestro equipo de cuidadores podrá ayudar a practicar algunas posturas de yoga en casa, para que cualquier persona puede disfrutar de sus beneficios independientemente de su situación y condición física. Adaptando las posturas a las posibilidades y necesidades de cada caso.