Pérdida de apetito en personas mayores

Facebook
Twitter
WhatsApp

Las personas mayores tienen que hacer frente a muchos síntomas relacionados con el retroceso de sus capacidades físicas y al envejecimiento. Una de ellas, que tiene un impacto muy elevado entre la población española, es la pérdida de apetito o hiporexia. Trastorno muy frecuente, que puede surgir a cualquier edad y por diversos motivos y, a pesar de que no se considera una enfermedad en sí misma, si que puede ser muy peligrosa por las carencias nutritivas que acarrea y por ser el aviso de alguna patología o enfermedad de relevancia.

¿Por qué las personas mayores pierden el apetito?

Aunque se trata de un trastorno que puede aparecer en personas de cualquier edad, no es menos cierto que su grado de incidencia entre las personas mayores es muy superior. Las causas de la pérdida de apetito en ancianos pueden deberse a múltiples factores que trataremos de explicar a continuación:

Causas físicas

Como ya hemos comentado, el aumento de las limitaciones físicas provocan, en consecuencia, una reducción de la movilidad de las personas mayores. Dificultades para moverse que desembocan en un estilo de vida cada vez más sedentario, sin actividades, por lo que la pérdida calórica se reduce. Menos consumo de energía, menos apetito.

Así mismo, con el paso de los años, uno de los cambios fisiológicos que se producen es la reducción progresiva del estómago y con él, la sensación de estar saciado se produce antes y las ganas de comer desaparecen.

Siempre se tiene que estar alerta porque la pérdida de apetito en personas mayores puede ser la señal de alerta de alguna enfermedad. Por lo que acudir al médico para descartar posibles afectaciones es muy conveniente.

Causas anímicas

Pero no solo puede estar relacionado con aspectos físicos. El estado mental es muy importante y tiene incidencia directa con el bienestar de todos, pudiendo desencadenar en una sintomatología muy nociva.

Ciertos estados anímicos, tales como la tristeza o el desasosiego, frecuentes entre la población mayor (debido a situaciones como la pérdida de un ser querido o la soledad) derivan, con frecuencia, en un descenso gradual del apetito.

Vivir en soledad, más allá de la tristeza que conlleva, también puede provocar que la persona mayor se descuide y abandone los hábitos de vida saludables y dejen de prepararse la comida, etc. Por falta de capacitación o, simplemente, por desgana.

¿Qué podemos hacer ante la pérdida de apetito o hiporexia de una persona mayor?

Resulta evidente que es muy importante, para evitar la pérdida del apetito de la persona mayor o contrarrestar sus efectos peligrosos, seguir algunas pautas o consejos:

Fraccionar las comidas

Conseguir que la persona mayor, a través de pequeños esfuerzos, vaya comiendo con regularidad evitando las comidas muy copiosas que pueden ser muy contraproducentes.

Tener paciencia

Es importante ser conscientes de que el anciano con hiporexia mostrará su desacuerdo y tratará de evitar seguir comiendo. Por lo que es necesario tener un poco de paciencia para conseguir persuadir a la persona mayor.

Dieta rica en nutrientes

Tratar de maximizar todos los alimentos que ingiera el anciano es importante. Por lo que preparar una dieta rica en nutrientes (con pescados, legumbres, carnes, lácteos, etc.) es la mejor manera de que, aunque coma poco, sus necesidades estén cubiertas.

Comidas que se adapten a los gustos del anciano

Ante la negativa sistemática de querer comer, tratar de satisfacer los gustos de la persona mayor con alimentos que sean de su agrado, es una manera eficaz para tratar de combatir la pérdida de apetito.

Prestar atención es vital

Y, sobre todo, el consejos más importante es prestar mucha atención a la persona mayor para detectar, y prevenir, cualquier efecto provocado por la hiporexia. Estar atentos y acudir a un médico es la manera de estar seguros de que todo marcha correctamente.

En muchas ocasiones, los familiares de la persona mayor, no podemos dar esta ayuda tan constante que nuestros seres queridos necesitan por falta de tiempo u otras obligaciones. Por lo que optar por una ayuda profesional, que de los mejores cuidados y atención al adulto dependiente, es la mejor manera para controlar la perdida del apetito y garantizar una vejez activa y saludable.

¿Te podemos ayudar?

Comparte el artículo

Facebook
Twitter
LinkedIn

2 comentarios en «Pérdida de apetito en personas mayores»

Deja un comentario