¿Qué implica y qué debemos saber?
¿Qué es la sordera?
La sordera es una enfermedad que afecta al oído y consecuentemente a la capacidad de escuchar. Esta pérdida de la audición puede ser parcial (hipoacusia) o total (cofosis). Se calcula que a nivel mundial más del 80% de las personas mayores, debido a las nuevas condiciones de vida, desarrollaran algún tipo de disminución auditiva; cabe destacar que en la mayoría de los casos la pérdida de la escucha se produce por la contaminación auditiva del espacio.
¿Qué factores de riesgo existen?
Sin embargo, existen otros factores que pueden producir problemas de audición. Algunos de los cuales son:
- Herencia genética: La sordera puede estar presente al nacer (congénita), o desarrollarse posteriormente.
- Deterioro por envejecimiento, antes mencionado. Actualmente, se estima que un 30% de la población geriátrica presenta trastornos de la audición.
- Afecciones como otitis o tumores: La otitis es una inflamación de los tejidos o partes del oído que si no se trata puede provocar una pérdida auditiva. Asimismo, los tumores en el oído como por ejemplo, los tumores óseos benignos del conducto auditivo externo, también pueden producir lesiones internas en los oídos si no se trata.
- Exposición continuada a ruidos fuertes, en el ámbito laboral o al escuchar música. Sobretodo en los países desarrollados, los ambientes ruidosos son más frecuentes y pueden producir problemas en el oído.-
- Traumatismos: accidentes con afectaciones externas o internas en el aparato auditivo.
- Medicamentos agresivos que pueden dañar el nervio auditivo.
¿Pero qué comporta en la vida de dichas personas?
Niños
Deben aprender el lenguaje de señas como forma para poder comunicarse así como deben contar en algunos casos con un intérprete en clase. A veces los padres para facilitar su enseñanza se deciden por centros especializados en discapacidades como la sordera, puesto que a veces este tipo de condición afecta al rendimiento escolar del niño.
Adultos
Se ven en desventaja en el ámbito laboral puesto que no pueden percibir todos aquellos matices comunicativos que ofrece el contexto; de igual manera no suelen estar acompañados por personas que también tengan problemas de audición, de modo que les produce más dificultades para adaptarse.
Personas mayores
Su calidad de vida se reduce drásticamente. Se produce el aislamiento social y familiar de la persona, puesto que tiene más dificultades para comunicarse; lo que le lleva en ocasiones a sentirse frustrado y deprimido, de modo que abandona de forma más frecuente las conversaciones con otras personas. Asimismo dejan de hacer actividades como ir al teatro o jugar a cartas debido también a los problemas que tienen de audición.
Por otra parte, existen tratamientos para poder mejorar la situación de estas personas, como el uso de audífonos o implantes cocleares; si bien es una opción no apta para todas las personas con problemas auditivos. Los implantes cocleares consisten en un dispositivo electrónico que se coloca en el interior del hueso, rodeando el oído, para poder enviar la señal eléctrica del sonido; mientras que en la parte externa se instala un receptor y procesador.